Recientemente la Revista del Domingo, del diario El Mercurio de Santiago, distinguió a los mejores fotógrafos jóvenes de naturaleza de nuestro país. Para ello consultó a varios conocidos fotógrafos seniors, a quienes se les solicitó que indicaran los que a su juicio profesional, son los más destacados de la generación de reemplazo en el arte de encontrar entornos que expresen sueños y emociones, como expresa Francisco Espíldora, colaborador de Semper Fides y uno de los artistas que recibió este notable reconocimiento de sus partners.
Francisco Javier Espíldora Brunet, está marcado por ese “touch of class” que se requiere para encontrar en lugares donde otros ven un paisaje, para mostrarlo como una explosión de luz y fineza que realmente asombra, quizás su fórmula sea la que todos los que nos dedicamos a fotografiar el entorno, andamos buscando, luz y simpleza. Otra singular característica es unir la juventud con la paciencia, como lo demuestra la magnífica imagen de los cóndores en expresión empática con la que ilustramos este perfil y esperamos que nos autorice a seguir utilizando, porque no sólo es magistral como imagen sino como expresión que los animales no humanos son seres cognitivos, emocionales y requieren todo nuestro respeto y admiración.
La esencia de una imagen es que persevere en nuestro pensamiento y nos permita asociarla con hechos que marquen nuestra perspectiva de la vida.
A los animales humanos, nos hace muchísima falta entender que somos parte de un entorno que nos pertenece a todos. Las imágenes de Francisco nos transportan a un mundo de respeto que hace mucha falta comprender. Sin duda Chile ha sido destruido por el rabioso antropocentrismo y hoy día sólo podemos contemplar lo que fue, en menos de un 1% del territorio. En medio de este descalabro que hemos convertido a nuestro país, desarrollar una imagen colmada de expresión es algo que merece la pena destacar. Epur se muove, a pesar del enorme esfuerzo que se ha hecho por acabar con el entorno, ahí la vida vuelve a torcer la mano del destino, en encontrarla y expresarla, ahí está el arte.
Claramente Francisco dejó de ser un promesa, sus imágenes están en la galería de los grandes profesionales. Cuenta con todas las herramientas para continuar en la ruta del éxito, es un activo formador de profesionales del deporte, un incansable pirquinero de la naturaleza, posee una técnica impecable y sólo tiene 33 años.
Gracias Francisco por compartir tu arte, tienes aún mucho tiempo para seguir trabajando, descubriendo y expresando y esperamos seguir compartiendo esa maravillosa expresión.
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